PLATAFORMA RARA

Nació en Argentina y es una fotógrafa feminista-queer que estudió artes visuales y diseño de moda. Construye retratos, en los que el desnudo tiene una gran presencia, buscando una manera de enfrentar la vergüenza, sin negar la dificultad de exponer el propio cuerpo, imperfecto pero hermoso. Con paciencia y mucho amor, Nadia acompaña a sus modelos en la pose y la elección de los pocos elementos que entran en escena, de manera delicada y cautelosa, dándonos una pista identitaria para leer cada imagen.

Por qué crees que es importante destacar la identidad de las personas retratadas en tus imágenes?

Creo que hay muchas personas que han luchado por su identidad, que la han buscado y se han sacrificado por ella, dándonos más libertad a las generaciones futuras. Por la historia que tengo, me siento parte de esa lucha y de alguna forma lo voy buscando en otras personas también. Empatizo con ellas y me gusta que mi trabajo sirva para poder generar una resistencia sobre eso. Siempre me gusta hablar de la resistencia, porque no es solo visibilizar algo sino también una cuestión política que indaga y cuestiona sobre ciertas bases sociales impuestas.

La desnudez parece recalcar en cierta idea de lo común, ¿Creés que en tus imágenes buscas un equilibrio entre lo singular y lo común? ¿Qué te gustaría rescatar de aquellas cosas que son comunes a todas las personas?

Eso común a lo que te referís es lo que yo percibo como una máscara imposible de quitar, el cuerpo. Estudié Diseño de Indumentaria y me es imposible no mirar todas las capas que llevamos por encima de nuestra piel. Sin embargo, cuando esas capas caen, ya no queda nada, solo eso: un cuerpo. Me gusta pensar en la piel como un borde entre lo externo y lo interno, entre lo que te conecta con el mundo exterior pero también con el mundo interior, con quien sos en soledad. Y ahí siento que entra lo singular, quién sos como persona, que te ha atravesado, etc. Con la fotografía intento unificar y mostrar ello. Por eso el cuerpo, por eso el desnudo, hasta el hartazgo.

¿Qué significa para vos la feminidad? ¿Qué crees haber encontrado allí que te resulte valioso?

Siento que puedo dar miles de explicaciones conceptuales y técnicas sobre esto, pero hay algo que es más hondo que todo ello y es mi historia. Yo solo fui criada por mujeres; y eso ha marcado mi vida de una forma crucial. Por más que muchísimas veces intente cambiarlo, forzarlo e incluso suprimirlo, está en mi, en mi vida. Ahora simplemente lo dejo ser. Y siento que mi trabajo es una forma de reivindicar eso, el linaje y la feminidad, no me atrevo a decir mujeres porque siento que los hombres y la masculinidad están muy presentes en mi trabajo, pero como dice Adriana Lestido: de forma tácita. Y lo tácito está, pero en silencio.

Siento que de alguna manera, tu insistencia en el retrato es también una insistencia en la humanidad, ¿buscás en tus imágenes presentar una humanidad posible, distinta a la que experimentas en el día a día? ¿Cuál es el vínculo entre humano-naturaleza que buscas construir?

¡Qué bello, gracias! Insisto, si. Y es que mis imágenes son el resultado de la relación con otra persona y eso siempre es un espejo. Aprendo, me nutro y me descubro gracias a conocer personas, la fotografía es una excusa para entender un poco el mundo y la humanidad.

Una última pregunta, un poco más técnica, ¿Cuál es para vos el dream team para trabajar? Siempre agradecés la colaboración de otras personas que te ayudaron, ya que una sola no podría hacer todo el trabajo

Agradezco siempre, y no me voy a cansar nunca. Porque yo trabajo con y para las personas ¿Qué haría sin ellas? A mi me encanta trabajar con personas que en cierta forma están emergiendo en algo. Y es porque me parece importante dar oportunidades, apoyar el talento de otras personas y ofrecer mi ojo como una ventana de otros mundos. Y siempre sale bien, porque talento no falta, sino oportunidades.